Un yogur cremoso y versátil, que podés usar tal cual o transformar en queso crema. Además, el suero que queda es un tesoro para futuras preparaciones y fermentaciones.
Un yogur cremoso y versátil, que podés usar tal cual o transformar en queso crema. Además, el suero que queda es un tesoro para futuras preparaciones y fermentaciones.
Mezclá la leche con el yogur y la leche en polvo.Colocá en frascos o en un recipiente más grande si querés hacer yogur estilo griego.Tapá y dejá fermentar a temperatura ambiente hasta que alcance la consistencia deseada (aprox. 8 horas para un yogur estándar).
Llevá los frascos a la heladera para que termine de gelificar.Para obtener yogur griego: colocá el yogur en un colador con lienzo o tela de algodón sobre un recipiente para recolectar el suero.Dejá en heladera 24 horas hasta que esté más firme en los bordes y cremoso en el centro.
Podés saborizar el yogur o transformarlo en queso crema agregando sal, pimienta, ciboulette o ajo en polvo.El suero que queda se puede usar para iniciar una nueva tanda de yogur, hacer budines, fermentar cereales o legumbres.Se conserva en heladera o freezer hasta que aparezcan hongos o signos de deterioro.
Soy Giselle Bilesio, Ingeniera Agrónoma y una apasionada del mundo de las conservas.
Desde hace mas de quince años me dedico a enseñar, asesorar y acompañar a quienes quieren eleaborar alimentos seguros, ricos y duraderos: desde emprendedores y fábricas hasta personas que simplemente disfrutan cocinar y conservar en casa.
