Una manera simple de aprovechar cáscaras y centros de membrillo para obtener una jalea brillante y translúcida. Ideal para untar, rellenar postres o regalar en frascos.
Una manera simple de aprovechar cáscaras y centros de membrillo para obtener una jalea brillante y translúcida. Ideal para untar, rellenar postres o regalar en frascos.
Lavar bien los membrillos, sacarles los cabitos, pelarlos y hervirlos en 4 litros de agua hasta que estén tiernos al pincharlos. Reservar la pulpa para otras preparaciones (almíbar, mermelada o al natural).
Colocar los centros y cáscaras en una cacerola con agua y hervir a fuego medio hasta reducir el volumen al menos un tercio.
Hacer la prueba de la pectina: si se forma un coágulo firme, filtrar el líquido con un colador fino o tela para obtener un líquido translúcido.
Por cada litro de líquido, añadir 700-800 g de azúcar y llevar a fuego fuerte.
Cocinar hasta alcanzar 66° Brix con refractómetro, 105-106°C con termómetro o mediante la prueba del platito.
Envasar en frascos limpios, sin dejar espacio de cabeza y sin pasteurizar si envasaste caliente. Nunca enfriar los frascos en el agua de pasteurización.
📌 Conservación:Dura hasta 3 años fuera de la heladera y 2 meses refrigerada una vez abierto.
Soy Giselle Bilesio, Ingeniera Agrónoma y una apasionada del mundo de las conservas.
Desde hace mas de quince años me dedico a enseñar, asesorar y acompañar a quienes quieren eleaborar alimentos seguros, ricos y duraderos: desde emprendedores y fábricas hasta personas que simplemente disfrutan cocinar y conservar en casa.
